Dado comienzo el 2013 y después de ver en una perspectiva algo más particularizada a los smartphones, tablets y otros dispositivos Android para este nuevo año, los editores de Xataka Android estamos dando la visión de lo que esperamos para el sistema operativo móvil de Google.
Así, mi enfoque para este año viene principalmente en una dirección: hacer de este sistema operativo uno más robusto y maduro, con posibilidades de escritorio añadidas y la dificultad para Google de no dejar al usuario menos intensivo perdido en mitad del camino.
Android se adentra en Chromium y se aproxima al escritorio
Al igual que Android 4.0 (Ice Cream Sandwich) supuso un giro de 180 grados en relación a lo que había antes a nivel de interfaz, Android 4.1 (Jelly Bean) lo hizo lo propio en términos de rendimiento, dando a los dispositivos una bocanada de aire en un sistema móvil que de una vez por todas se podía llamar ‘completo’.
Completo en su medida, claro. Cada vez los smartphones y las tablets se diferencian menos en cuanto a capacidades de lo que es un ordenador, y el software ha de seguir este avance paralelamente. Si bien ya estamos viendo los nuevos equipos y el nuevo hardware, fácilmente podríamos decir que esto no está pasando, puesto que una respuesta muy sonada por buena parte del público es la de “y para qué tanto”.
Ahí es donde entra la integración con Chromium de alguna forma. No nos vale con conectar el móvil a una pantalla y ejecutar todo en una interfaz venida al gigantismo, se necesita una interfaz completa y un nuevo modo de hacer las cosas.
Al igual que mi compañero Alejandro, creo que hay cancha en este aspecto y Ubuntu para móviles es un claro ejemplo de ello. Y es que el usuario que busca un mínimo flujo de trabajo puede huir de Android a apuestas como la de Microsoft de convertibles con Windows como el Surface.
También espero, dicho sea de paso, una explosión en la adaptación de aplicaciones para el formato tablet. En 2013 este tipo de dispositivos bajo Android van a tomar las riendas, y si han de surfear la ola tienen que pasar por ese aro.
Por último en este aspecto, Google necesita poner sobre la mesa una forma sencilla de hacer que cuando renueves el móvil, dicho rápidamente, puedas seguir las partidas del Angry Birds donde las dejaste. Esto es, un sistema de sincronización en la nube donde poder clonar el estado de nuestro dispositivo en otro nuevo sin mayores complicaciones.
Encontrando y manteniendo la coherencia de la interfaz en una evolución constante
Pero si bien esto puede ser muy útil para mucha gente y aportar versatilidad al sistema, añadir posibilidades es muy sencillo que suponga dificultades añadidas para muchos otros. Lo difícil es ir completando el sistema operativo de una forma medianamente intuitiva y continuista, o eso parece.
Y es que esta es una de las grandes pegas que ha tenido Android desde un principio. Seguramente la mayoría de vosotros habréis oído aquello de que ‘hace falta ser ingeniero para saber usarlo’ o expresiones por el estilo.
Como ya he dicho, Google ha mejorado y mucho la interfaz desde lo que era antes de Android 4, pero también lo ha hecho dando quizás algunos bandazos de más, que hacen la curva de aprendizaje para el usuario medio-bajo más inclinada de lo que debiera. Hablo pensando en detalles como la doble barra de notificaciones en la nueva interfaz tablet, que considero un recurso redundante y confuso, como el constante cambio en la pantalla de bloqueo en la que se añaden accesos directos para luego quitarlos o la recientemente modificada botonera en la interfaz tablet.
Es por esto que espero que Google haya encontrado el sitio de todos estos pequeños elementos de uso tan habitual, porque si bien en general no considero la fragmentación en Android un aspecto negativo, ésta última junto a este tipo de cambios pueden crear todavía más confusión al entorno.
0 Response to "Android en el 2013: maduración del sistema operativo en una evolución más continuista"
Publicar un comentario